Wednesday, December 10, 2025

𝗧𝗨 𝗦𝗢𝗟𝗘𝗗𝗔𝗗 𝗖𝗢𝗡 𝗗𝗜𝗢𝗦

Prof. Félix Miranda Quesada

Después de tantas búsquedas, pausas, silencios y reflexiones, hay un momento en el camino en el que entiendes algo que no siempre se dice en voz alta y que a propósito he omitido en mis artículos anteriores, seguro de que lo tienes presente; y es que toda soledad siempre tiene compañía. Incluso cuando estás a solas contigo, incluso cuando parece que nadie mira, nadie escucha y nadie entiende hay una Presencia que nunca se ha movido de estar junto a ti. Cuando tomas conciencia de ese descubrimiento se transforma por completo la forma en que vives tu vida interior.

En todos estos artículos hemos explorado la soledad como fuente de claridad, creatividad, descanso y equilibrio. Pero ahora nos corresponde cerrar el círculo, para que no escape nada; la soledad no solo te conecta contigo te conecta con Dios. Y cuando eso ocurre, es cuando verdaderamente lo interno se acomoda, el ruido baja y aparece una paz muy distinta, más profunda, más serena, más verdadera. Es como un sello a las bondades de la soledad que, al final de la jornada, es la mejor soledad, pues es soledad con la mejor compañía.

Cuando te quedas a solas nunca estás solo

Hay silencios que asustan y estoy consciente de ello y hay espacios internos que incomodan. Pero esos espacios, los que nadie ve, los que nadie percibe, son los mismos donde Dios trabaja con más delicadeza. Ahí, en ese lugar donde dejas de actuar, de demostrar, de correr o de pretender sobresalir, puedes reconocer esa voz suave, pero poderosa, con la que nada ni nadie puede competir, es la voz de Dios. Dios no habla a gritos, habla en calma; y la soledad, cuando la abrazas sin miedo, se convierte en el escenario perfecto para escucharlo.

Cuando sueltas el ruido aparece esa fuerza poderosa

A veces creemos que necesitamos más ruido para no sentirnos solos. Pero es al contrario, la verdadera fortaleza aparece cuando te animas a bajar el volumen, a quedarte en silencio y a sostener tu alma sin distracciones. Es en esa quietud, esa que al inicio incomoda, donde Dios ordena lo que está disperso dentro de ti. Te devuelve visión donde hay confusión, y calma donde hay tensión; te muestra que lo que buscabas afuera siempre estuvo disponible dentro de ti.

La verdad es que la soledad no te debilita, te prepara, te fortalece, te estabiliza y te recuerda que no tienes que cargar la vida con tus propias fuerzas solamente. Siempre hay alguien que ha estado a tu lado dispuesto a ayudarte y consolarte como la mejor compañía en tu soledad.

El espacio íntimo donde se restaura todo

Cuando te das permiso de estar contigo y con Dios, algo cambia; no cambia de golpe pero cambia. Empieza a nacer una claridad que no viene de pensar demasiado aplicando tu inteligencia, sino de rendirte, de reconocer que necesitas guía, que necesitas luz, que necesitas una paz que solo puede venir de Él. Y ahí, en esa entrega silenciosa que haces, en ese rendirte, se restaura lo que estaba roto, se aliviana lo que pesaba y se ilumina lo que parecía oscuro. Y eso no es magia, es la presencia de Dios.

Dios en tu aliento, en tu pausa y en tu camino

Cada vez que respiras profundo, es como si Dios te dijera, aquí estoy, no te alarmes, no estás solo. Cada vez que haces una pausa consciente, recuerda que hay una Mano sosteniéndote en lo invisible, cada vez que caminas en silencio, Él camina contigo. Y aunque el mundo avance rápido, tu alma puede moverse a otro ritmo, el ritmo de Su Presencia, ese ritmo que te permite pensar mejor, sentir con más claridad y vivir más alineado con lo que realmente importa.

Tu soledad es como un altar

Hay una verdad que pocas veces se dice, porque puede asustar; la soledad, bien vivida, se convierte en un altar, un lugar donde no hay apariencias, donde no hay argumentos que sostener, donde no hay presiones, solo tú y Dios. Ahí puedes orar sin palabras, puedes llorar sin explicaciones, puedes agradecer con el corazón abierto y puedes renovar la fe sin necesidad de discursos demagógicos, solo tú y Dios. Tu soledad es un espacio sagrado, no porque estés solo, sino porque ahí reconoces Quién siempre estuvo contigo.

Este cierre es un comienzo 

Este es el cierre de nuestra serie sobre la soledad, pero también es un inicio, un recordatorio de que tu tiempo contigo no es un escape, ni una huida, ni un signo de debilidad, es un reencuentro, un acto de franqueza profunda, y, sobre todo, una cita divina, un reconocimiento espiritual de la mejor compañía.

Debes entender que cuando aprendes a estar a solas con Dios, cuando dejas que el silencio se llene de Su presencia, cuando permites que en esa calma te hable, la vida se acomoda de una forma diferente. Se hace más liviana, más clara, más llena. Tu soledad con Dios no es el final del camino, es más bien, el punto donde todo empieza a tener sentido.


Tuesday, December 9, 2025

𝐔𝐒𝐀 𝐋𝐀 𝐒𝐎𝐋𝐄𝐃𝐀𝐃 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐑𝐄𝐂𝐔𝐏𝐄𝐑𝐀𝐑 𝐓𝐔 𝐏𝐀𝐙 𝐈𝐍𝐓𝐄𝐑𝐈𝐎𝐑 - 𝐓𝐀𝐋 𝐕𝐄𝐙 𝐋𝐎 𝐍𝐄𝐂𝐄𝐒𝐈𝐓𝐄𝐒 𝐌𝐀́𝐒 𝐐𝐔𝐄 𝐍𝐔𝐍𝐂𝐀

Por: Félix Miranda Quesada

Vivimos en una época donde todo está conectado, donde siempre hay algo pendiente, y donde cada día parece haber más exigencia. En ese ritmo constante, la soledad suele verse como un lujo que pocos pueden permitirse o peor aún, como una señal de debilidad. Pero dedicar tiempo intencional para estar contigo es, en realidad, una de las formas más sólidas de recuperar tu paz interior.

La soledad nos abre un espacio que casi nunca encuentras en el día a día, una pausa real para respirar, escucharte y ordenar lo que llevas dentro. Esta soledad te permite bajar revoluciones, recargar energía y enfocarte de nuevo en lo que importa de verdad. Y cuando usas esa soledad con intención, se convierte en una herramienta poderosa para tu bienestar emocional y mental. Aquí te comparto algunas ideas de cómo convertir esos momentos de quietud en un apoyo real para tu equilibrio interno. Creo que puede serte útil.

1. Crea un espacio personal que te invite a la calma

Para aprovechar tus momentos de silencio, comienza por elegir un lugar físico donde tu mente pueda descansar. Puede ser un rincón en tu casa, una banca en tu parque favorito o incluso un espacio tranquilo en el trabajo durante la pausa.

Rodéate de cosas que te transmitan bienestar, un rótulo que te guste, una vela suave, una libreta especial, cualquier cosa que te haga sentir en casa. Tener un espacio designado para estar contigo mismo le da a tu mente una señal clara de que aquí puedes bajar la guardia, reconectar contigo y recargar.

2. Respira profundo y practica presencia

La soledad es el escenario perfecto para hacer un alto real. Dedica unos minutos a tu respiración, si aún no sabes nada sobre esto, trata de aprender técnicas de respiración; incluso podrías tomar algún curso en línea al respecto. Mientras practicas alguna técnica, deja que tu atención vuelva al presente.

No se trata de desconectarte del mundo, sino de reconectar contigo. Ese pequeño ejercicio reduce tensión, baja el ritmo interno y te regresa a un estado más sereno y claro.

3. Usa la escritura para ordenar tus ideas

Escribir es una práctica muy importante para la mente y muchas personas no lo saben o lo subestiman; escribir en momentos de soledad es una forma directa de entender qué está pasando dentro de ti. Toma un bloc de ntoas o un cuaderno y escribe sin estructura, lo que sientes, lo que te preocupa, lo que te alegra, lo que quieres ajustar. Podrías plantearte preguntas simples como:

- ¿Qué me está absorbiendo últimamente?

¿Qué debería agradecer hoy?

Preguntas como estas pueden abrir puertas a respuestas que normalmente no encuentras en medio del ruido diario.

Escribir funciona como una especie de análisis personal, te ayuda a soltar, a aclarar prioridades y a ver con honestidad lo que necesitas atender.

4. Apaga un rato el ruido digital

Esto es muy importante. La soledad pierde sentido cuando la llenas de notificaciones y pantalla. Durante tu tiempo personal, desconéctate, pero con intención.

Pon el teléfono lejos, apaga alertas que no necesitas o activa el modo “No molestar”. Ese pequeño respiro digital le devuelve a tu mente la capacidad de concentrarse en ti, sin interrupciones externas.

5. Vuelve a la naturaleza cuando puedas

La naturaleza tiene un ritmo distinto, más genuino, más lento, más estable. Salir a caminar, sentarte frente al agua, cuidar tus plantas o simplemente mirar el cielo puede restaurar algo en ti sin que tengas que hacer ningún esfuerzo especial.

El contacto con la naturaleza te sostiene, te calma y te recuerda perspectivas que a veces se pierden en el caos y el ruido del día a día.

El poder real de los momentos de silencio

Usar la soledad para recuperar tu paz interior no significa huir del mundo, ni desconectarte de las personas, y mucho menos crear una burbuja. Significa darte un espacio para escucharte con claridad, para reenfocar tu energía y para recuperar tu equilibrio antes de seguir adelante.

Cuando haces de la soledad un hábito intencional, fortaleces tu mente, tu estabilidad emocional y tu capacidad para tomar mejores decisiones.

La soledad, bien utilizada, no es egoísmo, es un regalo que te das. Un lugar al que puedes volver para reencontrarte, ajustar tu rumbo y recordar que dentro de ti hay más calma de la que crees.

 Nos leemos en el próximo artículo. Te invito a compartir este artículo y te agradezco el compartir.


Monday, December 8, 2025

DESBLOQUEA TU CREATIVIDAD Y TU CLARIDAD MENTAL EN TUS MOMENTOS A SOLAS

Prof. Félix Miranda Quesada

Llegan las semanas en las que el mundo entero empieza a bajar la velocidad. Las fiestas, las luces, las reuniones familiares y los deseos de paz y amor generan un ambiente distinto, casi simbólico, un recordatorio de que necesitamos detenernos, respirar y escucharnos un poco más. Y en medio de este cierre de año, que a veces es caótico, otras veces nostálgico y casi siempre lleno de emociones, aparece un espacio que solemos olvidar, los momentos a solas.

Encontrar claridad y creatividad no siempre es sencillo, sobre todo cuando la vida se mueve rápido y demanda más de lo que quisiéramos. El flujo constante de información, mensajes y pendientes deja poco margen para pensar de verdad, para reflexionar desde un lugar profundo donde nacen las mejores decisiones.

Pero la soledad, tan subestimada hoy, sigue siendo una herramienta muy poderosa. Estar a solas te permite alejarte del ruido, tomar aire y descubrir una capacidad de enfoque y creatividad que muchas veces permanece dormida. Y esta temporada tan especial, con su mezcla de cierre y renacimiento, es ideal para retomarla.

He pensado que algunas de las siguientes prácticas pueden ayudarte, especialmente en estas semanas donde el año termina y el nuevo pide oportunidad y claridad.

1. Aprovecha la fuerza de las pausas conscientes

Uno de los mejores regalos que puedes darte al cerrar el año es incluir pausas intencionales a lo largo del día. No necesitas grandes espacios, cinco minutos podrían ser suficientes para respirar con calma, ordenar ideas y liberar un poco de la tensión mental acumulada.

Estas pausas funcionan como un filtro natural, decantan lo urgente, bajan el ruido interno y abren espacio para ideas más frescas. Ya sea que necesites poner distancia de un proyecto retador o simplemente descansar la mente, esas pausas crean terreno fértil para una nueva claridad.

2. Dale permiso a tu mente para divagar

Ya he dicho en otros artículos, que ser estructurado ayuda a cumplir tareas, pero la creatividad aparece cuando la mente se mueve sin supervisión. Los momentos a solas te permiten eso, pensar sin prisa, sin expectativas y sin la presión de entregar resultados.

Caminar, mirar por la ventana o simplemente quedarte en silencio pueden abrir conexiones que no aparecen en medio del estrés diario. Y en estas fechas, cuando solemos hacer balances, replantear metas y pensar en lo que viene, esa divagación consciente puede convertirse en una fuente inesperada de claridad.

3. Sumérgete en una actividad creativa que te haga bien

El fin de año invita naturalmente a lo sensorial, a lo cálido, a lo que conecta, cocinar, escribir, pintar, tocar música o simplemente arreglar tu espacio. La soledad es un escenario perfecto para esto.

Cuando te permites crear sin interrupciones, no estás buscando perfección; estás recuperando tu propia voz. Es increíble cómo un acto sencillo, una receta nueva, una frase escrita, rayas en un cuaderno, puede reactivar tu imaginación y despejar un rumbo para el próximo año.

4. Ordena tu mente escribiendo

Escribir es una de las formas más efectivas de procesar lo que el día no te deja entender. Durante tus momentos a solas puedes tomar un cuaderno y escribir sin estructura, sin filtros, sin meta.

Escribir funciona como una auditoría emocional. Ayuda a entender qué sientes, qué te falta, qué te sobra y qué quieres que cambie en el nuevo ciclo que inicias. Te sorprenderá lo que aparece cuando dejas que tu mano avance sin rumbo.

5. Reduce las distracciones digitales, especialmente en estas fechas

La soledad puede ser un regalo pero si la llenas de pantallas, notificaciones y “scroll interminable”, pierde su valor.

Protege tus momentos a solas como proteges tu salud o tu descanso; silencia el teléfono, apaga notificaciones innecesarias y date permiso para desconectarte un rato. Esa breve desintoxicación digital te devuelve foco, te da serenidad y te permite pensar con un nivel de profundidad que durante el año normalmente no tienes.

El verdadero regalo de la soledad en fin de año

Desbloquear creatividad y claridad mental no significa retirarte del mundo ni convertirte en ermitaño. Significa darte un espacio para escucharte con honestidad, para reenfocar tu rumbo y para conectar con tu propósito antes de que empiece el nuevo año.

En la soledad recuperas ideas, encuentras nuevas perspectivas y redefines prioridades. Si aplicas estas prácticas, tus momentos a solas dejarán de ser silencios incómodos y se convertirán en un impulso real para crecer, crear y vivir con más intención. Y quizá, este fin de año, el mejor acto de amor, y de amor propio, sea darte el tiempo que durante meses postergaste, tu tiempo.

LÉEME EN EL PRÓXIMO ARTÍCULO; COMPARTE CON TUS AMIGOS.

Sunday, December 7, 2025

𝗔𝗣𝗥𝗢𝗩𝗘𝗖𝗛𝗔 𝗧𝗨𝗦 𝗠𝗢𝗠𝗘𝗡𝗧𝗢𝗦 𝗗𝗘 𝗖𝗔𝗟𝗠𝗔 𝗬 𝗘𝗡𝗖𝗨𝗘𝗡𝗧𝗥𝗔 𝗧𝗨 𝗣𝗥𝗢𝗣𝗢́𝗦𝗜𝗧𝗢

Por: Félix Miranda Quesada

Hoy la vida parece una carrera permanente, pendientes que no se acaban, notificaciones que interrumpen todo y una interacción constante que no da tregua. Y lo peor es que todo parece estar dirigido a una competencia en el que todos quieren ganar. En medio de ese ruido, los instantes de silencio pueden sentirse como tiempos muertos, como espacios que necesitamos que llenar, pero ¿y si esos momentos fueran justamente la puerta que necesitas para entender mejor tu camino y reconectar con lo que realmente importa?

Cuando eliges la calma y te regalas unos minutos a solas contigo, creas un espacio valioso para pensar, ordenar y comprender todo lo que ocurre. ¿Cómo puedes mirar esos momentos desde otra perspectiva y aprovecharlos a tu favor? Te hago las siguientes propuestas:

1. Mira la quietud como una oportunidad

En realidad, el silencio no es ausencia de acción; es más bien, un espacio disponible para que te reencuentres contigo. En lugar de interpretarlo como algo improductivo, debes considéralo como un terreno fértil para pensar, revisar tus prioridades y aclarar tus ideas. Ese pequeño cambio de enfoque convierte la quietud en un recurso real para avanzar.

2. Date permiso para escuchar tu voz interior

Con el ritmo acelerado del día a día, tu propia voz puede quedar enterrada bajo todo ese ruido externo. Los momentos de calma te permiten escuchar lo que estás pensando y sintiendo de verdad. Creo que podrías plantearte preguntas como: ¿Qué necesito? ¿Qué está pidiendo mi vida en este momento?

Esa escucha atenta y honesta te orienta y te ayuda a actuar de manera más acorde con tus valores.

3. Usa la calma para pensar en lo que de verdad importa

La quietud, realmente, es un buen escenario para revisar las preguntas grandes como: ¿Qué quiero construir? ¿En quién me quiero convertir? No se trata de resolverlo todo en un solo intento; en principio basta con reflexionar. A veces una sola pregunta bien hecha, en un momento de silencio, es suficiente para abrir un camino que no estabas viendo.

4. Practica el arte de estar presente

Los momentos tranquilos te dan la oportunidad de practicar algo sencillo, pero crucial. ¿Qué es eso tan importante? estar aquí, en este instante. Presta atención a cosas como tu respiración, a lo que ves, a lo que sientes. Cuando te ubicas en el presente, aparece una calma distinta y una capacidad renovada para apreciar lo que realmente tiene valor. La presencia te ayuda a hacer las paces con lo cotidiano y a encontrar sentido en lo simple y esto es un gran logro.

5. Permite que la creatividad aparezca

Las ideas de mayor calidad suelen surgir cuando te das un respiro y permites que tu mente se acomode. Cuando tu mente no está atrapada en las urgencias del día, tiene espacio para imaginar, conectar puntos y proponer caminos nuevos. Ya sea escribiendo, garabateando ideas o simplemente dejando que la mente divague, la quietud puede abrir puertas que parecían cerradas.

6. Vive la soledad como un espacio seguro

Por último, no etiquetes tus momentos de calma como soledad negativa. Estar contigo mismo no es un castigo; es un recurso valioso. La soledad bien llevada te da una mejor perspectiva, te estabiliza y te ayuda a conocerte mejor. Es un espacio para afinar el rumbo; por lo tanto, no un estado del que debas huir.

El significado que aparece en el silencio

Los momentos tranquilos no están vacíos como pudiera parecer; están llenos de posibilidades. Cuando decides entrar en ellos con verdadera intención, es cuando encuentras claridad, y sentido. En un tiempo en el que todo compite por tu atención, estos instantes se vuelven un maravilloso regalo, una oportunidad para hacer una pausa, respirar y regresar a lo que consideras esencial.


Tuesday, February 6, 2024

CONOZCAMOS LAS CUALIDADES DE EQUIPOS EXITOSOS

Aquí vamos a hacer un repaso de las principales características que un equipo debe poseer. Si no identificas a tu equipo con estas características, necesitas analizarlo más detenidamente.

Objetivos claros

El equipo debe tener objetivos claramente definidos. Este es el propósito con el que se ha establecido el equipo. Todos en el equipo deben ser conscientes de estos objetivos y deben trabajar hacia su consecución.

Importancia de las cualidades de los equipos

División del trabajo

Aunque un equipo es una fuerza movilizada única, cada persona en el equipo es una unidad que contribuye a su manera al funcionamiento general del equipo. Estos objetivos también deben establecerse de antemano, cuando se incorpora a un miembro al equipo.

Interacción

La interacción entre los miembros del equipo es muy importante, y esta debe ser una interacción saludable. La interacción puede ser por razones personales, pero en su mayor parte debe ser para lograr los propósitos que el equipo en su conjunto está buscando.

Pensamiento lógico

No puede haber reglas establecidas sobre cómo debe pensar o comportarse un equipo. Esto depende más de la situación o circunstancias. Debido a eso, es imperativo que los miembros del equipo piensen de manera lógica y tomen decisiones racionales. El papel del líder del equipo se vuelve importante en este sentido.

Aceptación de Decisiones Mayoritarias

Cuando se reúnen varias personas, es comprensible que las opiniones difieran. Sin embargo, los equipos no pueden quedarse con estas opiniones divergentes, ya que se necesita tomar decisiones. Un buen equipo tendrá un sentido de adherencia a la votación mayoritaria.

Compatibilidad

Ningún equipo puede progresar sin un sentimiento de amistad mutua entre los miembros del equipo. Debe haber informalidad mutua entre los miembros y ninguna discrepancia. Si existen problemas, deben resolverse de manera civilizada.

Fuerza Unida

Un equipo debe pensar de manera unida. Esto no significa que los miembros individuales no puedan estar en desacuerdo. Claro que sí, pero luego deben llegar a decisiones comunes mediante métodos de votación mayoritaria. Sin embargo, para todos los demás propósitos, debería haber un sentimiento leal en cada miembro hacia el equipo.

Evaluación

Es vital que los equipos sigan evolucionando. Deben reunirse a menudo solo para decidir cuáles han sido sus logros, qué obstáculos se interponen en su camino, qué deficiencias tienen y cómo mejorar en ellas. Los equipos deben seguir evolucionando de acuerdo con las circunstancias cambiantes.



 


Wednesday, January 31, 2024

EL ARTE DE TRABAJAR CON PERSONAS: DEFINIENDO UN EQUIPO

La construcción de equipos y la gestión se han convertido en uno de los elementos más importantes para el éxito de los nuevos negocios. Es crucial trabajar en unidad si se busca alcanzar algún grado de éxito. Examinaremos cómo puedes asegurarte de que tus equipos pasen la prueba y logren el éxito que tu empresa o negocio ha estado buscando.

Veamos qué define a un equipo. Hoy en día, la palabra equipo se utiliza de manera muy simple. Las personas llaman equipo a cualquier grupo aleatorio, incluso en el ámbito corporativo, donde es muy importante saber qué es un equipo y usarlo para progresar. Un equipo no es un grupo aleatorio de personas. Es un conjunto de personas que se unen para lograr un propósito particular. Un equipo corporativo se encarga de una tarea específica. Un equipo de investigación científica trabaja junto para inventar o desarrollar algo. Un equipo deportivo intenta ganar un evento deportivo para su nación, ciudad o lo que sea que estén representando.

Todos los miembros del equipo están unidos
en un propósito común

De manera similar, existen diversos equipos y pueden tener un número diferente de miembros, pero todos estos miembros están unidos por un propósito común, están tratando de alcanzar un objetivo común. Un equipo es una combinación única de personas porque, de cualquier manera que se forme, termina siendo un grupo de personas con cualidades complementarias. Esta es una característica esencial de un equipo.

Así, en un equipo corporativo, podríamos tener un visualizador, un ejecutor, un pensador, un planificador, y así sucesivamente. Estas personas tienen diferentes méritos y eso es lo que los mantiene en el equipo. Sus méritos son diferentes, pero están alineados de tal manera que complementan los méritos de otras personas. Esto es lo que hace que un equipo sea una fuerza a tener en cuenta. Tenemos que darnos cuenta de que todos tenemos aspectos positivos y negativos. Ninguno de nosotros es perfecto. Esa es la necesidad de tener equipos en primer lugar.

Cuando intentamos formar un equipo, consciente o inconscientemente, tratamos de unirnos con personas que tienen talentos que nosotros no tenemos. Pero nuestras intenciones son las mismas. Simplemente cada uno puede hacer un trabajo en particular bien hacia el logro del objetivo.

En la mayoría de los casos, los equipos necesitarán un líder, pues el líder del equipo es la fuerza cohesiva que mantiene unidos a los miembros del equipo. El trabajo del líder del equipo es bastante esencial, ya que es él o ella quien actúa como la amalgama que mantiene unidos a los miembros. Al mismo tiempo, el líder del equipo establece y enfatiza los objetivos e ideales para el equipo.

Monday, January 15, 2024

DECISIONES Y RIESGO PUESTO EN CONTEXTO

Algunas personas suelen hacerme preguntas en privado y, a veces personalmente, sobre algunas de mis aseveraciones y consejos sobre el ÉXITO, el CRECIMIENTO Y DESARROLLO PERSONAL y sobre MENTALIDAD POSITIVA.

Preguntas como: "Profe, ¿por qué dices eso?; ¿Profe, ¿qué te faculta para hablar del éxito?; ¿Profe, eso no es teoría? y, así discurren en sus preguntas, análisis, inquietudes, dudas. No solo mis estudiantes de Secundaria lo hacen y lo han hecho, también algunos de mis Estudiantes Universitarios que, a pesar de su proximidad a graduarse tienen dudas y temores.

Lucha por tus sueños
Muchas veces mi respuesta es muy escueta y,en otras ocasiones me explayo y abundo en explicaciones y ejemplos que, por cierto, no es lo más importante. Y, ¿por qué no es lo más importante? Porque ante todo, es tu actitud la que determinará, en gran medida, tu éxito.

En este corto artículo te presento una ANÉCDOTA y lo hago en contexto:

La Realización de tus SUEÑOS siempre llevará implícitos dos elementos: DECISIÓN Y RIESGO. Por lo tanto, tu decisión y el riesgo implícito solo deberás tomarlos sí y solo sí, sientes que tu sueño logrado te hará más feliz, más realizado y más libre. Recuerda el RIESGO.

Aquí la anécdota. Aunque son varias te contaré de una:

“Hace un tiempo renuncié a una Plaza en Propiedad, de esas Plazas que algunas personas llevan años esperando. Era una buena plaza y recién la había ganado en una especialidad en la que había trabajado interino por varios años. LA RENUNCIÉ. iProfe! “¿Renunciaste una propiedad en esa especialidad?” “¿Cómo así?” “Profe, llevo años esperando mi propiedad”; y expresiones así por el estilo eran las que escuchaba de mis estudiantes de Licenciatura y Maestría”. Hasta aquí la corta anécdota, una de tantas. ¿Por qué lo hice? Por alcanzar un sueño, por buscar realización en un campo de mi interés, por cumplir aquello de lo que tanto hablo respecto de una Mente de Crecimiento versus una Mente Fija.

Pero tú no tienes que hacer eso; no debes renunciar a ninguna Plaza en Propiedad pues, tal vez esa Plaza en Propiedad que ahora tienes o que vas a lograr pronto, sea ese sueño por el que has luchado y renunciado a otras cosas, por el que has tomado diferentes decisiones, asumiendo riesgos de diferente naturaleza.

Solo quería recordarte que el logro de nuestros sueños, de nuestras aspiraciones, de lo que nos hace felices y nos hace sentirnos más libres y realizados, siempre llevará implícitos Decisiones y Riesgos.